Que tenga paz con sí mismx.
Que putee a quien tenga que.
Que se desgarre con quien tenga que.
Que aprenda de quien tenga que.
Y que nada de eso le duela.
Que mire firme.
Sostenga firme.
Que se mantenga firme.
Que sea suficiente.
Que confíe.
Que valore la incondicionalidad.
Que no rompa las plantas.
Que no se adore.
Que no se obstine.
Que no posea.
Que sea feminista.
Que crea en los ovnis.
Que no le guste Star Wars.
Que sepa de música lo que pueda expresar con las manos.
Que le guste escuchar teorías conspirativas.
Que me deje contarle mis sueños.
Que no disfrute del olor de los libros.
Que no haya perdido la capacidad de sorpresa.
Que se sienta pequeñx.
Que se sienta inmensx.
Que le brillen los ojos.
Que mida lo que dice.
Que no mida lo que imagina.
Que no cierre puertas.
Que su intuición sea innata.
Que no tenga miedo de tener miedo.
Que no tenga miedo de decir que tiene miedo.
Que me deje abrazarle si le da miedo.
Que sepa cuánta suerte tiene de tener la vida.
Que ame a sus padres. Sean quienes sean.
Que no ande construyendo burbujas.
Que sea incapaz de mentir.
Que sea capaz de cazar una mentira.
Que sepa de descontrol.
Que conozca su condición salvaje.
Que sea salvaje.
Que me diga mi nombre completo cuando se levanta a la mañana.
Todo eso, si o no a todo eso. No importa.
Pero que yo, por favor sí, sea suficiente.