Alguien que me alcance el bisturí!!

Voy a rebanar a algún infeliz. Hace unos días, así por así, el destino me llevó a lo mas burdo, lo mas obsceno de la sociedad; un momento "Crónica TV", así amarillista, degenerado. El oscuro rincón matinal del ser humano, patitas corriendo, caras hinchadas, cejas fruncidas... HORRIBLE. En el detenerse de alguna situación ví una cara arrugada, fría pude sentirlo sin tocar, las manos rojas, la nariz irritada. Vendiendo gorros de lana, regalando su salud. Pasa alguien, de su misma edad, pero claramente miembro del "escalón mas arriba" en la estructura piramidal. Nada saludable, mas bien putrefacto. '¿Cómo andás viejito? ¡¿Cómo te trata la vida?! Che, ¿No vendés gorros de corderoy? Esos lindos, con estilo...'. La mirada triste que el vendedor ambulante le propició a su mercadería fue desoladora. Como si se hubiera sentido culpable de no poder complacer, como odiandose. Pensar que, tal vez, lo único en el mundo para él es ese espacio, estorbando en la vereda para muchos. Nadie se detiene a comprarle, y cuando alguien pasa, denigra de forma burlona su realidad. 'Tengo de lana. Pero si querés algo así como decís vos... ¿Ves ahí en frente? Ese local vende esos gorros... No lo vas a poder pagar, pero por ahi te dan uno roto... ¡Ja Ja Ja!'
La simpleza de la respuesta... No ha lugar a estúpidas acotaciones.