Sobre plagios y dolores propios

Supón que creés que estás escribiendo la mejor historia del siglo... De repente, despues de unos cuantos años de idas y venidas, la historia se publica, parece tener éxito y llega al cine... De hecho nunca se publica, llega al cine directamente. De la mano de un genial director (que vos adorás), que también es un espectacular guionista, de seguro la historia será reconocida en millones de lugares del mundo. Resulta prometedora para la prensa especializada (ponele) y casi al borde de unos cuantos premios al mérito de tan ingeniosa idea.
Pero el BORRADOR de tu historia sigue en tu computadora, sigue en tu cabeza, no ves la evolución. Qué pasa entonces? No es plagio. Vos estás en el tercer mundo, nunca te encontraste con ese director-guionista que parece haber tocado dos segundos tu argumento y completarlo con completas y verdaderas imágenes (valga le rebundancia).
Depresión, angustia... Qué va a ser!! A otra cosa mariposa, tenés que quemar todo eso...

Tu historia se publica, tu vida sentimental para con la historia se derrumba, perdés un hijo... Es casi como perder un hijo, de hecho... Perdiste una hija... Se te ocurrió algo no? "American Splendor"

Vacunate... Es imposible.-

1 comentario:

  1. Quiero saber por qué ahí arriba no hay lugar para reaccionar bien, el maso no me gusta, el malo menos y el horrible no existe.

    Ahh! ya entendí! Si te gusto firma! Gil! jaja

    Un beso Pia.

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